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10 Cosas Que Debes Tener En Cuenta Antes De Empezar Un Negocio Propio

Autor: Sebas CelisAutor: Sebas Celis
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Si tan sólo antes de iniciar un negocio, la mayoría de las personas hubiésemos sabido ciertas recomendaciones y cosas a tener en cuenta, probablemente nos hubiera ido mucho mejor, especialmente en las fases iniciales.

Por eso si estás pensando en abrir un negocio, o en crear eventualmente alguno (incluso si no es ahora), te quiero contar 10 cosas que debes tener en cuenta antes de iniciar.

Tip #1

Seguramente has escuchado en algún momento que lo ideal a la hora de abrir un negocio es dar valor, ofrecer valor al mercado, a las personas, a las empresas, a quien sea que vaya a comprar tu producto o servicio.

Sea como sea, dar valor siempre va a ser clave a la hora de emprender y brindar un producto o servicio.

Pero, lo que muchas personas no te dicen, es que no es suficiente dar valor.

Dar valor está bien. Dar valor es excelente.

De hecho muchos negocios no se enfocan en dar valor sino únicamente en ganar dinero… Y eso no es lo ideal.

Uno no debería tener un negocio solamente para ganar dinero, porque lo más seguro es que eventualmente ese negocio fracase o que tú no te sientas motivado o inspirado para trabajar en él.

Aquí la cuestión, aparte de dar valor, es que debemos estar seguros de que el mercado quiere recibir ese valor, o de que suficientes personas están dispuestas a pagar para recibir ese valor.

Puede que algo sea súper mega-valioso de tu parte, que lo ofrezcas y que la gente quede súper feliz… Pero que hayan 4, 5 personas máximo, dispuestas a pagar por ello.

A lo que me refiero es, que antes de empezar un negocio, hay que validar inicialmente la demanda real que existe.

Eso se puede hacer de muchas maneras, analizando la competencia, y demás (deberás estudiar al respecto para tenerlo más claro).

Pero verdaderamente hay que estar seguro de que, no sólo vamos a ofrecer valor, sino que el mercado va a querer recibirlo y pagar por él.

Tip #2

Es vital Separar Las Finanzas Personales De Las Finanzas Del Negocio.

Tener una cuenta bancaria diferente, anotar todo por aparte, saber que este billete no es mío sino de mi negocio.

Es más, eventualmente cuando luego de un tiempo estemos sacando dinero como ganancia del negocio (que no debería ser el primer año ni siquiera), darnos un sueldo del negocio y formar parte de la nómina, que es lo que yo personalmente hago.

No que las ganancias del negocio sean mis ganancias de bolsillo, todo absolutamente separado.

Eso es lo ideal, y si no lo haces, va a ser muy complicado realmente manejar las finanzas mezcladas.

De hecho, por facturas y todo lo demás, totalmente diferenciado.

Tip #3

Debes tener clara tu Disponibilidad De Tiempo Y Otros Recursos: Tu atención, energía, dedicación, cuántas horas al día le vas a dedicar a tu negocio y durante cuánto tiempo.

Hay gente que le dedica 10 horas diarias a su negocio, y llevan 10 años en ese negocio.

No tienen un plan claro para retirarse o para dejar de ser tan imprescindibles en su propio negocio, por lo que son básicamente un empleado más.

Tip #4

Reconocer El Poder De La Reinversión.

No gastarse los primeros frutos que rinda el negocio.

Si tan sólo muchos de los negocios que empiezan, tomaran las ganancias y las utilidades de sus primeras ventas y las re-invirtieran para crecer, sobre todo bien reinvertidos (es decir, en cosas que les amplifique el éxito y les acelere su camino hacia el éxito), realmente muchos más formarían parte de la pequeña estadística de los negocios que siguen abiertos luego de un año.

La basta mayoría de los negocios, un año después, ya no están funcionando.

5 años después, el 5% o el 3% apenas están siendo rentables. El resto, todos los demás, prácticamente quebraron.

Y muchas veces es precisamente por el tema de la reinversión.

Si no le saco y desangro mi negocio al inicio, va a tener mucha más capacidad de continuar creciendo al inicio y luego saber en qué momento empezar a tomar algo de ganancias, y no va a ser apresuradamente.

Tip #5

Si es posible, preferiblemente No Te Endeudes.

Muchas personas empiezan un negocio propio con la ilusión de que van a lograr muchas cosas, y eso está muy bien.

Esa actitud, ese empuje y ser «echado para adelante», el decir «no importa lo que haga, yo voy a sacar adelante este negocio«… Está muy bien.

Sin embargo, se endeudan de una manera que si el negocio fracasa, no tienen de dónde pagar.

Entonces, o preferiblemente no endeudarse, esperar para ahorrar y tener el capital para inversión.

O saber con quién asociarse (que también te voy a mencionar algo de eso).

O tener un plan muy estricto y muy específico de cómo pagar, teniendo en consideración el peor escenario posible.

Tip #6

Conocer A La Perfección Tu Cliente.

No hay nada peor que un negocio que no tenga ni idea de cuáles son sus prospectos o sus clientes, las personas que están dispuestas a pagar por sus productos o servicios.

¿Y qué significa conocer?

Saber realmente qué es lo que les llama la atención del producto, entender cómo llegaron a ellos, cómo se dieron cuenta de lo que uno ofrece, qué es lo que más les gusta, qué es lo que no les gusta, cómo sería el producto ideal o el servicio ideal que pudiéramos ofrecer.

Realmente estar en la mente de ellos y prácticamente leer sus mentes para decir: «uff, si tan sólo hubiera esto…», y lanzarlo como producto.

Eso no es posible, y de hecho no es fácil, a menos de que estemos en contacto con los clientes.

Tip #7

Saber Con Quién Asociarte.

Si tú vas a crear un negocio con un amigo, el amigo de toda la vida, con quien has tenido muy buena relación…

Hay que planear que este negocio puede llegar a 10, 20 años, ¿cierto?

¿O acaso vas a empezar un negocio y a planear desde el inicio que no dure todo ese tiempo?, es decir, ¿Vas a condenarlo de una vez al fracaso?

Por supuesto que no.

Pero sí dura 10 o 20 años, ¿cómo va a ser tu relación con este amigo en ese momento?

¿Quién podría salirse antes de tiempo y bajo qué circunstancias?, ¿cómo podrías estar seguro que verdaderamente es la persona con la que vale la pena asociarte?, ¿o cómo podrías reducir los riesgos?, ¿o cómo podrías gestionar una relación de conflicto en caso tal?

Todo esto hay que tenerlo en cuenta, y preferiblemente iniciar un negocio solo, o con socios que sean inversionistas de capital, pero no tengan capacidad de decisión, o lo que sea.

O simplemente, dejar a un lado la amistad o la familiaridad, y poner todo muy claro en papeles, contratos, reglamentos. Para que de forma legal, las cosas marchen independientemente del vínculo personal con la otra persona (y hablo incluso de una pareja).

Muchas veces este tipo de conflictos hace que negocios muy buenos y muy exitosos, se vengan al piso… Por discusiones, o conflictos de interés.

Tip #8

Es uno muy interesante: Prepararse Para Crecer.

Hay negocios que llegan a crecer tanto que se mueren de éxito.

Es decir, no tienen la capacidad para satisfacer la demanda, no tienen la forma de cumplirle a todos los clientes nuevos, tienen que rechazar nuevos negocios, nuevos clientes, nuevas ventas, porque no están preparados para crecer, no hicieron un plan de qué pasaría si crecieran mucho.

Si tú lo haces y no creces, no pasa nada.

Pero si no lo haces y creces, probablemente te vas a reventar, como una burbuja que crece tanto que llega el punto en que su tensión superficial la hace insostenible.

Tip #9

Contar Con Personas Que Crean En Tu Idea.

No necesariamente amigos o familiares que te digan «ay si, qué chévere, genial que vas a emprender«…

Sino las personas que forman parte de tu negocio.

A veces es mejor contratar a alguien que quizás no tiene las habilidades tan bien desarrolladas para el negocio, sino que realmente está de tu lado, te entiende a ti, valora el negocio, apoya tu idea y está alineado con tu visión.

Con esas personas es mucho mejor trabajar, que con alguien que sepa lo que hace, pero está desconectado de la realidad de tu negocio y del propósito de la misma.

Tip #10

Es Fundamental Desarrollar Tu Visión Y Tu Plan.

Tu plan no significa que tú digas «el lunes hago esto, el martes hago esto, el año 2022 en agosto 17 voy a estar…», no.

Todos tenemos que ser flexibles, el mundo nos ha demostrado durante los últimos tiempos que las cosas pueden cambiar de repente y tenemos que estar preparados para cualquier eventualidad.

Pero eso no significa dejar tener un plan.

¿Qué puede pasar?, o ¿qué puedo yo hacer si estas cosas que podrían ocurrir, eventualmente pasan?

Y hacer un plan de contingencia, es decir, cuál es el curso de acción en caso de que algo no salga como yo lo espero.

No es un plan B, ni es un plan C, ni es un plan D.

Los «planes B» son para fracasados.

Se trata de un plan A muy bien estructurado y que tenga las posibles ramificaciones, siendo el mismo plan.

Una vez tenemos en cuenta estas cosas, verdaderamente estamos mejor armados y con más herramientas para poder llevar a cabo nuestras ideas de negocio.

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