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¿Existen Caminos Rápidos Al Éxito?

Autor: Sebas Celis

El éxito instantáneo…

La gente AMA el éxito instantáneo. Todos quieren lograr sus sueños YA mismo.

¿O no?

Bueno, realmente sí, al menos la gran mayoría de personas. Muchos sueñan con que de uno momento a otro, «les cambie la vida», y se quedan esperando a que pasen cosas como ganarse la lotería, o conocer a alguien que les ayude a resolver sus problemas.

En definitiva, se quedan esperando conocer caminos rápidos hacia el éxito.

Sin embargo, y en el otro lado de la moneda, personalmente he conocido muchos casos de éxito Super Acelerado. Situaciones en donde las personas han crecido increíblemente rápido, en diferentes aspectos de su vida (casi siempre financieramente).

Entonces la duda es ¿Existen O NO caminos rápidos al éxito?

¿Puede alguien disminuir la distancia (ya sea en tiempo, recursos, esfuerzo… etc) necesaria para llegar a sus metas?

La Confusión Generalizada

Las personas desean tener todo ya. En esta era de la información, hemos sido «programados» para obtener gratificación inmediata. Algunas empresas aprovechan esto para vender con estrategias tales como: «Llévalo hoy y págalo en 2 meses». En general, queremos que todo sea inmediato, y estamos condicionados a pagar por ello en muchos sentidos.

Sin embargo, no poodemos confundir (como muchos) el hecho de que el éxito puede lograrse de inmediato, con el hecho de que existen atajos o maneras de reducir la brecha entre nuestros sueños logrados y nuestra realidad actual.

La separación entre la realidad que vivimos y la realidad que deseamos vivir, puede ser acortada de diferentes maneras, y esto es lo importante.

Sin Embargo

Existen 2 problemas fundamentales que las personas pueden afrontar:

1. Querer Éxito De Inmediato

Por un lado, están quienes quieren éxito inmediato. Son esos los que conforman a los cientos de miles de personas que buscan en Google mes a mes cosas como: «como puedo ganar dinero ya», «dinero gratis», «hechizos para conseguir pareja», «oracion para resolver todos los problemas»… etc.

Son personas que esperan un milagro que cambie sus vidas esta noche, para que mañana se levanten como nuevos sin retos que afrontar. Éste es el extremo al que llegan los que se cansan de confiar en sí mismos, y confían en algo más allá de ellos: otras personas, otras situaciones, y hasta otras entidades.

2. No Creer En Estrategias Eficientes

Y en el otro extremo, están quienes no creen que pueda mejorarse la productividad, ser más eficientes y lograr las métas más rápido. Éstas personas están cansadas de ver promesas de riqueza de la noche a la mañana. Se rindieron ante un deseo de lograr todo pronto, luego de ver que realmente no era posible.

Las personas en este grupo quizás en algún momento fueron parte del primer grupo. O quizás conocieron personas del primer grupo y dijeron algo como: «Nunca seré así, no veo que lleguen a ninguna parte con ese pensamiento».

Y aunque en principio es una buena idea, dejan de lado lo más importante: La esperanza. Ellos dejan de lado el hecho de que pueden crecer como personas, y aplicar el Desarrollo Personal para maximizar sus posibilidades de triunfar en la vida.

¿Qué Podemos Recomendarle A Ambos Grupos De Personas?

Muy sencillo, 2 cosas:

Hay que dejar de pensar en Éxito Inmediato. Si te fijas en el título del artículo, verás que no digo: «Éxito instantáneo» sino «camino rápido» al éxito. Es decir que no estoy apelando al hecho de que se pueda lograr todo de la noche a la mañana. Sino que por el contrario, estoy buscando acelerar el proceso del logro de metas.
También hay que dejar de ser pesimista y negativo. No por ver el fracaso de algunos cuantos, ya vamos a creer que para nosotros será imposible triunfar. No por eso, vamos a dejar de creer en la eficiencia, la eficacia y la efectividad. No por eso vamos a dejar de confiar en nosotros mismos.

La clave de todo radica en la Rapidez del éxito que queremos lograr. La rapidez, puede relacionarse con la velocidad, y la velocidad es relativa al sistema.

Si hablamos de rapidez en el logro de metas, entonces debemos tomar en cuenta que relativamente, lograr una meta «más rápido» no necesariamente implica hacerlo en 2 días. Puede ser que una meta que tarde 5 años en ser lograda, ahora sólo requiera 4.

O que los estudios profesionales de alguien requieran un semestre menos.

O que en el gimnasio, las personas deban realizar menos esfuerzo con mejores ejercicios.

LO IMPORTANTE: es que sepamos que rapidez, no significa inmediatez.

Ahora Bien, ¿Existen O No Esos Caminos Rápidos?

Ya deberías saberlo. ¡Por Supuesto Que Existen!

Por supuesto que hay maneras de incrementar tus habilidades y capacidades para ajustarte a ser la persona adecuada y lograr tus metas.

Por supuesto que hay mejores maneras de vivir la vida, y mejores estrategias para tomar decisiones.

Por supuesto que hay mejores negocios, o mejores alternativas y tácticas empresariales.

Por supuesto que hay mejores empleos, o autoempleos… Y mejores caminos como el emprendimiento.

Por supuesto que hay caminos más rápidos hacia el éxito en cualquier ámbito. Pero siempre hay que recordar que rápido no significa instantáneo.

¿Y Cómo Tomo Uno De Esos Caminos Rápidos?

En realidad, no es tan complejo como crees.

Imagina que intercambiamos la mente de una persona perezosa, por la de una persona productiva.

Supongamos que un día, ambas personas se despiertan en cuerpos distintos.

La persona perezosa: se despierta en un hogar organizado, con una lista de tareas por hacer, teniendo la ropa lista para ponérsela luego de ducharse. En el refrigerador tiene un recordatorio sobre la comida que dejó en la noche para calentar, y en su lugar de trabajo tiene todo preparado para empezar.

¿Crees que aún teniendo todo el entorno a su favor, la persona perezosa seguirá el mismo estilo de vida que la persona productiva? Por supuesto que no.

Probablemente, luego de despertarse un poco confundido, quiera seguir durmiendo. Y eso que sin contar, el hecho de que que ni se fijaría en su lista de tareas, porque querría «hacerlo luego».

La persona productiva: por su parte, se levantaría en un entorno de desorden, se daría cuenta que no tiene un propósito de vida y que mucho menos tiene definido lo que debe hacer en el día. Tomaría acción inmediata para organizar su cuarto, quizás luego de darse una ducha.

Crearía su lista de objetivos, y empezaría a trabajar cuanto antes en volver a «la normalidad».

Ambas personas tienen un marco mental de referencia, que los hace pensar que algo es Normal. Para una de ellas, la dejadez es común. Para otra, el orden y la eficiencia.

Y ¿Qué tiene que ver todo esto con los camino rápido al éxito?

Todo, prácticamente: ¿Qué podríamos hacer si quisiéramos acortar el camino al éxito de la persona perezosa? Pues sencillamente, cambiar su cerebro, por el de una persona productiva.

Y ESA es la estrategia para acortar el camino al éxito. Cambiar tu mentalidad, tus patrones de pensamiento y comportamiento, cambiar tus hábitos, ideas, objetivos y metas.

Cambiar tu mente.

Este proceso de cambio, no tarda (en el peor de los casos) más de 3 meses. Y luego de eso, las personas pueden aprovechar una inercia positiva que los lleve a producir cambios trascendentales en sus vidas.

Indudablemente, si se empieza con un cambio de mentalidad, las acciones posteriores tienen garantizada la tracción y el empuje necesario para el éxito (hablamos de motivación y fuerza de voluntad). Sin embargo, sin un cambio de mentalidad, es prácticamente influir en el entorno para que las cosas cambien.

Finalmente, todo se reduce a que primero, seamos por dentro la persona que queremos ser. Y luego, empecemos a reflejar justamente eso exteriormente.